Yo creo que son varios factores relacionados con el frío los que afectan al consumo. En primer lugar, como bien dices, el coche tarda más en calentarse y en que lubriquen bien todos sus fluidos. En segundo lugar, el aire frío es más denso por lo que hace aumentar la resistencia al avance, sobre todo a altas velocidades y también influye en la presión de los neumáticos, que con el frío desciende y aumenta el contacto con la carretera. En tercer lugar, el frio afecta mucho a las baterias, y eso hace que el motor gaste más en recargar y así calentar las baterias. Por último, y muy importante, la calefacción hace aumentar bastante el consumo, al exigir que el motor esté constantemente bien calentado para enviar ese calor al habitáculo.